El hormigueo en las manos debe preocuparle cuando es persistente, intenso o va acompañado de otros síntomas preocupantes. Aunque el hormigueo en las manos puede deberse a menudo a factores benignos y temporales, cuando el dolor empeora, es aconsejable solicitar una evaluación médica en un hospital o centro de urgencias. Estas son algunas pautas que le ayudarán a determinar cuándo debe recibir atención médica:
Aparición súbita y gravedad: Si el hormigueo aparece de repente y es intenso, puede ser signo de un problema más agudo, como una compresión nerviosa o una lesión, que requiere atención médica.
Hormigueo persistente o progresivo: Si el hormigueo en las manos persiste durante un periodo prolongado o empeora con el tiempo, puede indicar un problema de salud subyacente que debe ser evaluado por un profesional sanitario.
Entumecimiento o debilidad: Si el hormigueo va acompañado de entumecimiento, debilidad o dificultad para mover las manos o los dedos, podría ser indicativo de una lesión o compresión nerviosa.
Traumatismo o lesión: Si el hormigueo es consecuencia de una lesión en la mano, la muñeca o el brazo, es esencial que lo evalúe un profesional médico para descartar fracturas, lesiones nerviosas u otros problemas.
Síntomas inexplicables: Si el hormigueo no está asociado a ninguna causa aparente y experimenta otros síntomas inexplicables, como mareos, dificultad para hablar, pérdida del equilibrio, dolor torácico, dificultad para respirar o confusión, puede ser un signo de una afección subyacente más grave, como un ictus o un infarto de miocardio, que requiere una evaluación médica inmediata.
Edad y factores de riesgo: Los adultos mayores y las personas con factores de riesgo cardiovascular, como hipertensión o colesterol alto, deben tener cuidado con el hormigueo, ya que a veces puede ser un signo de reducción del flujo sanguíneo a las manos.
Si le preocupa el hormigueo en las manos, es esencial que consulte a un profesional sanitario para una evaluación adecuada. Ellos pueden evaluar sus síntomas, realizar las pruebas necesarias y proporcionarle un diagnóstico o remitirle a un especialista si es necesario. La detección y el tratamiento precoces de las afecciones subyacentes pueden mejorar los resultados y evitar posibles complicaciones. En caso de duda, siempre es mejor pecar de precavido y buscar atención médica ante síntomas inexplicables o preocupantes. Un profesional sanitario puede realizar una evaluación exhaustiva, diagnosticar la causa subyacente y recomendar un tratamiento adecuado. Por lo general, el médico puede realizar una serie de pruebas:
- Examen físico (incluido un examen neurológico).
- Análisis de sangre para comprobar los niveles hormonales y vitamínicos.
- Pruebas de diagnóstico por imagen, como radiografías, resonancias magnéticas o tomografías computarizadas.
- Pruebas de función nerviosa.
- Obtenga su historial médico.
Aunque los tratamientos variarán en función de la causa de la sensación de hormigueo en la mano, si se trata de un problema musculoesquelético, QC Kinetix puede proporcionar alivio.
